El silencio de la locura
El arte de encajar
La antigua capilla del hospital se ha convertido en un taller repleto de arte. Son muchos los cuadros, pinturas, collages o figuras que invaden las mesas y las paredes de este espacio. Bajo la luz de los fluorescentes trabajan cuidadosamente algunos de los creadores, cada uno a su manera y con su estilo más personal.
Está demostrado que escribir o dibujar sobre lo que pensamos y sentimos alivia el sufrimiento psíquico de cualquier persona, sin necesidad de tener algún problema de salud mental. De una reflexión similar nace el proyecto de ‘Arte Espida’, que vio la luz en el año 2019.
Pero, ¿en qué se basa y cuál es su objetivo? La Dra. Chus Gómez lo explica en el siguiente video.
Capilla del antiguo sanatorio antituberculoso de Piñor.
Imagen: cedida
Taller de 'Arte Espida' (2024).
Imagen: Aroa Gutiérrez
Fue tal el éxito de esta iniciativa que en el año 2023 se recopilaron algunas de las obras creadas en una exposición, bajo el título ‘Escoitar cos ollos’.
El lugar que la acogió fue el centro cultural Marcos Valcárcel (Ourense), un espacio donde artistas de todas partes muestran sus obras al mundo, ¿por qué debía ser distinto esa vez?
Visibilizar la igualdad en aspectos tan simples para la mayoría, marca la diferencia y se vuelve algo muy importante para ellos. Esto les ayuda a conseguir un lazo social, a sentirse dentro de la comunidad como uno más.
Dra. Chus Gómez: “Cuando alguien ve una obra no hay etiquetas por detrás”.
La exposición se dividía en dos plantas. La planta baja estaba dedicada a la historia del antiguo psiquiátrico de Toén desde una visión histórica y artística donde, entre otras cosas, se mostraban una multitud de cuadros y pinturas rescatadas de los talleres que allí también se impartían.
En la planta de arriba se podía disfrutar de las obras realizadas en ‘Arte Espida’, las cuales, sin mucho texto y de una manera lo más poética posible, pretendían contar múltiples historias, dando total libertad de interpretación a quienes las admiraban.
Son muchas las obras que ahora se exponen en los pasillos y despachos del hospital psiquiátrico de Piñor esperando poder llegar a ser expuestas en un museo permanente algún día.